Lactancia materna
- Nutrición para tu empresa
- 6 ago 2018
- 3 Min. de lectura

Todos los años del 01 al 07 de Agosto se celebra la Semana Mundial de la Lactancia Materna, con el objetivo de fomentar su práctica y así mejorar la salud de los lactantes; por lo que dedicamos nuestra publicación mensual a esta Etapa de la Vida.
La Organización Mundial de la Salud recomienda la Lactancia Materna Exclusiva los primeros 6 meses de vida del bebé; después de ese tiempo se inicia la alimentación complementaria pero es importante mantener la lactancia por lo menos hasta los 2 años de edad del niño.
La Lactancia Materna Exclusiva confiere diversos beneficios no sólo para el bebé sino para la madre. Entre los cuales podemos desglosar los siguientes:
En el infante disminuye el riesgo de: infecciones gastrointestinales y del tracto respiratorio, otitis media, síndrome de muerte súbita infantil; así como de enterocolitis necrotizante en bebés prematuros o con bajo peso al nacer. Existiendo una posible relación entre la lactancia materna subóptima (nula, parcial o de corta duración) con el desarrollo de trastornos autoinmunes (diabetes mellitus tipo 1, enfermedad celíaca), asma, exceso de peso y sus comorbilidades (hipertensión, diabetes mellitus tipo 2, enfermedades cardiovasculares, dislipidemias).
En la madre reduce el riesgo de hemorragia y depresión postparto; además podría existir una relación de un menor riesgo de desarrollar hipertensión diabetes mellitus tipo 2, distintos tipos de cáncer; así como facilitar el vínculo madre-hijo.
Un temor frecuente durante la lactancia es la preocupación por la hidratación de la madre y su capacidad para tener un suministro adecuado de leche; esto únicamente se justifica en condiciones extremas, como en la sequía severa o periodos de hambruna.
También es importante comentar que, de acuerdo a la frecuencia, duración e intensidad de la succión del lactante, se logra estimular la producción de grandes volúmenes de leche.
En los siguientes puntos desglosamos algunas cuestiones importantes de la alimentación y estilo de vida de la madre durante la lactancia:
Se recomienda el consumo de una a dos porciones de pescado a la semana; evitando la ingesta excesiva (<150 g al mes) de aquellos con niveles elevados de mercurio, como el atún congelado/fresco, tiburón, marlín, o pez espada; debido a que pueden repercutir en el desarrollo neurológico del bebé.
Se pueden consumir cantidades moderadas de cafeína (<300 mg al día), sin que esto afecte a los bebés sanos nacidos a término. Los bebés prematuros pueden ser más sensibles por lo que es necesario que la madre observe a su bebé detenidamente para descartar síntomas de sobre-estimulación; en cuyo caso sería necesario disminuir/suspender el consumo de cafeína.
Continuar con la suplementación de ácido fólico.
No fumar y evitar ambientes con humo.
Evitar los suplementos (en forma de tabletas, cápsulas o extractos) de las siguientes hierbas (debido a posibles efectos adversos): Naranja amarga, Echinacea, Menta/Hierbabuena, Hoja de frambuesa roja, Escaramujo, Romero.
El consumo de jengibre se debe limitar a la cantidad que se encuentra en los alimentos, evitando las tabletas, cápsulas o extractos.
Bibliografía
Organización Mundial de la Salud. Semana Mundial de la Lactancia Materna 2018 [Internet]. Ginebra: Organización Mundial de la Salud; 2018 [citado 02 Agosto 2018]. Disponible en: http://www.who.int/es/news-room/events/detail/2018/08/01/default-calendar/world-breastfeeding--week--2018
Lessen R, Kavanagh K. Position of the academy of nutrition and dietetics: promoting and supporting breastfeeding. J Acad Nutr Diet. 2015 Mar;115(3):444-9.
Mahan K, Raymond J. Krause’s: Food & the Nutrition Care Process. Canada: Elsevier; 2017.
Women's Health – Lactation. Knowledge Pathway. PEN Nutrition. Last Uptated: 2014-02-20; Dietitians of Canada, 2017.
Comments